WISHVILLE
ROL
~Brujos~
Nombre: Celestia
Avatar: Kalani Hilliker
Enfermedad psicológica: Antropofobia y paranoia
Historia: Nació en Londres, Inglaterra, una país y ciudad un poco fría, su nacimiento fue inesperado, no fue deseada como muchos, tras nacer, sus padres le daban muchas cosas, de hecho las que ella pedía, todo, lo único que no le daban era amor, alguien con quien compartir su lado romántico. Su madre murió joven tras un accidente de coche, desde ahí ella sintió como una parte de su vida se iba y se quemaba poco a poco, su padre nunca la cuidó muy bien pues la que le daba protección era su madre, un día su padre hizo una fiesta en su casa donde trajo varios amigos desconocidos para ella, mientras ella dormía sintió como una mano gigante tapaba su boca y la dormía poco a poco, llevándola a ser totalmente sumisa con la otra persona, esa noche para ella fue la peor, pues mientras el señor la violaba así mismo le pegaba dejandole marcas que no se quitarían por el resto de su vida, desde allí su miedo a quedarse sola en algún lugar o momento empezó. Su padre murió tiempo después pero a ella no le afectó pese a que él no la trataba como una mujer.
Pasó mucho tiempo, ella vivía sola, no dependía de nadie, se pagaba su universidad y hacia lo que a ella le apetecía,llego el momento de que un hombre cambiaría su vida, al ella quedar perdidamente enamorada de él. Mala decisión, aquel hombre acabó por dañar su corazón y abandonarla, causando un terrible dolor en ella y siendo el inicio de una gran fobia hacia las personas, odiaba estar cerca de alguien y por ende se aisló de todo el mundo al formar también en ella una fuerte paranoia que no le permitía llegar a relacionarse con alguien.
Pasaron los meses y continuaba aislada de todo el mundo evitando a más no poder el contacto con alguien, pero esto solo generó burlas hacia ella por parte de sus compañeros de universidad, hasta el día en que iba caminando de regreso a su casa y al pasar por un callejón, un grupo de chicos la tomó por sorpresa acorralándola y comenzando a golpearla y a abusar de manera verbal, causando que aquel pequeño hilo que quedaba en su mente acabara por romperse y abriendo de esta manera el portal que la llevaría a Wishville donde tenia un gran futuro por delante, que pronto descubriría siendo hechicera...
Especie: Bruja
Edad: 21 años
Bando: (Definido por user)
Fecha de entrada a Wishville: (Definida por user)
Nombre: Maximillium Rose
Avatar: Halsey
Enfermedad psicológica: Esquizofrenia
Historia: Maximilium Rose siempre fue independiente. Su lema de vida era "nunca debas nada a nadie, nadie te debe nada a ti". Chica problemática, chica gamberra, mala influencia, y otras más palabrerías eran las que tenía que escuchar en su día a día.
En su casa, su madre era maltratada por su nuevo marido, tras ser abandonada por el padre de Max. Ella, tratando de evitar involucrarse en los problemas de casa, desde siempre estaba callejeando, de fiesta, de escapadas, e inclusive consumiendo drogas o alcohol.
Hacerse oídos sordos y fingir que nada sucedía era una buena forma de escapar de la realidad. Y de las voces. Sobretodo aquellas voces. Le apasionaba tocar la guitarra eléctrica, la verdad sea dicha. Su sueño era formar una banda, abandonar los estudios y formarse en una carrera musical profesional. O algo por el estilo.
Pero su madre la llamaba ilusa y se lo tenía prohibido. "Soñar" estaba considerado algo tabú en aquella casa.
Su mejor amiga Mireia, una aficionada al juego, siempre le estuvo enseñando de sus más preciados trucos. Compartían todos los secretos, sabían todo de la una y la otra. Pero todo cambió cuando comenzó a salir con un joven enganchado al mundo del dinero fácil, mucho más allá que las dos amigas. Mireia cambió por completo, hasta desaparecer del mapa.
Max se veía sola en ese infierno. Bueno, eso cuando no le acompañaban las voces. Y con "voces" se hace referencia no a los cotilleos y miradas de la gente entrometida, curiosa y despiadada. Con "voces" se hace referencia a eso, simples voces. Voces que le gritaban, le pedían, le aconsejaban. Pero ella las ignoraba. Estaba asustada, aunque no quisiera mostrarlo al mundo.
Un día, una discusión entre su madre y su nuevo marido comenzó a preocuparle. Demasiados golpes. Demasiados gritos. Más de lo normal. No aguantaba más. Se encerró en su cuarto, cerró los ojos con fuerza y se tapó las orejas. Quería silenciar las voces, y quería silenciar todo su alrededor, un infierno conocido como realidad. Así fue como llegó a Wishville.
Especie: Bruja
Edad: 24 años
Bando: (Definido por user)
Fecha de entrada a Wishville: (Definida por user)
Nombre: Aiden MacQuoid
Avatar: Alejandro Corzo
Enfermedad psicológica: T.O.C y Parammnesia Reduplicativa
Historia: Se cree en algo llamado destino, coincidencia, fe que hace que cada persona esté en el mundo por alguna razón, la de Aiden era trazar caminos que guiaran la vida de las personas que más le necesitaban.
Desde muy pequeño el hijo de los MacQuoid relucía por su nobleza y bondad lo que le hacía punto de mira a habladurías y mentiras de aquellas personas a las que su luz eclipsaba. Aún así, con las palabras de estos a sus espaldas era capaz de tender una mano cuando más lo prescindían.
Nunca fue un niño que le faltaran cosas; gracias al trabajo que el padre de [Aiden Black.] le otorgaba al suyo. Pese a tener al dinero como mayor aliado siguió sin corromperse manteniendo esa humildad que le hacía relucir.
A sus 15 años la empresa en la que trabajaba su padre tuvo que reducir la plantilla siendo afectada la familia MacQuoid. Fue entonces cuando, para no caer en la decadencia comenzó a crear su mundo entre libros, a investigar de la pintura y la escritura, evadirse y formarse con la idea de que ahora era él quien debía de llevar esa casa adelante. Con todo ello comenzó a delirar, más bien a obsesionarse con el orden y la perfección; no había cuaderno que no tuviera páginas pares, lápices que no estuvieran cromáticamente ordenados, ropa que no estuviera ordenada por colores. Aiden tenía T.O.C junto a otra enfermedad que el llamaba "su filosofía" Paramnesia Reduplicativa; a veces en en el instituto creía que se veía andando por los pasillos o que las habitaciones de su casa estaban duplicadas en otras.
Con todo ello continuó labrando su camino hasta que la suerte le volvió a sonreír, siempre lo hacía, pero esta vez deslumbraba: tenía trabajo como profesor, libros publicados y obras de arte en galerías. Era el momento en el que tanto esfuerzo dio sus frutos. Siendo capaz de mantener su casa, se permitió costearse otra donde tuvo al hijo de los Black como invitado. Esa fue su última instancia en el mundo terrenal; mientras conducía fue víctima de un infarto y su coche descarriló dando lugar a una tragedia.
Especie: Brujo
Edad: 30 años
Bando: Dylan (Rey)
Fecha de entrada a Wishville: 14/04/1988
Nombre: Megumi (OCUPADA)
@Darkwitch_Wv
Avatar: India Eisley
Enfermedad Psicológica: Síndrome de Peter Pan
Historia: Es la hija menor de una familia con deudas: por malos negocios de sus padres, quedaron en la pobreza absoluta, llegando a pasar días enteros sin comer; los cobradores iban cada mes y golpeaba a su padre mientras humillaban a su madre, quien las escondía a su hermana y a ella en el sótano. Aunque difícil, su vida no era del todo mala, ya que entre la pequeña familia, existía un cariño y unión excepcional.
Poco después de cumplir siete años, los cobradores perdieron la paciencia y decidieron asesinar a sus padres; como siempre ambas hermanas se encontraban ocultas, pero ante los gritos desgarradores de su madre la mayor decidió salir y ayudar, detrás de ella Megu intentó detenerla, pero lo único que pudo conseguir al abrir la puerta fue ver como disparaban en la cabeza a su hermana y los cuerpos muertos de sus padres en el suelo.
Asustada, levantó la mirada y pudo toparse con los asesinos viéndola fijamente; empezó a temblar mientras esperaba su muerte, la cual nunca llegó, ya que aquellas personas decidieron otro destino para la menor.
Duró otros siete años de vida como sirvienta de aquellos señores, los cuales la maltrataban cada que podían, la joven pensó que su tortura nunca terminaría, hasta que un día, decidieron acabar con su vida; la arrastraron hasta un sitio desolado donde pensaban asesinarla, pero en un pequeño impulso de esperanza y de despiste por parte de sus secuestradores la chica salió corriendo sin rumbo fijo lejos del lugar; para su suerte pudo huir exitosamente, llegando a un orfanato, donde la acogieron enseguida.
Cuando cumplió diecisiete su mente ya estaba quebrada, y su odio por todo ser humano se hizo presente, pero también creció su fuerza mental, la cual la convirtió en una psicópata de primera, torturando a sus compañeros, llegando a matar a algunos; pero claro, para no ser descubierta siempre buscaba víctimas que tenían enfermedades graves o terminales, así sus excusas como "lo encontré muerto" o "al final fue mas grave de lo que pensábamos" le servían a la perfección ante la juzgada palabra de personas que en realidad no estaban interesadas por la salud de los niños.
A los 18, por ser mayor de edad, fue echada del lugar, y tras buscar refugio durante algunas semanas, se encontro con Matthew, quien la empezó a cuidar como un hermano mayor.
Actualmente es el único con quien le gusta pasar tiempo; después de vagar varios días junto al chico, terminó por pasar a Wishville, ni siquiera se dio cuenta, ya le daba igual todo.
Especie: Bruja
Dones: Cataclyst/Shape Shifter
Edad: 19 años
Bando: Eli (Reina)
Fecha de entrada a Wishville: 31/10/2009
Nombre: Helios Grimaldy (OCUPADO)
Avatar: Matthew Daddario
Enfermedad Psicológica: Trastorno Obsesivo Compulsivo y Cleptomanía
Historia: Vayamos a Venecia, donde una familia no muy adinerada tuvo bajo su techo un joven, llamado Helios a su nacer.
Tras sus tres años, la familia de helios se vería obligada a quedar en la calle, debido a las altas deudas que esta poseía.
A la edad de sus cinco años, empezó a tener cierto gusto por objetos que no eran suyos, si, los acababa robando. No obstante siempre era pillado y una nueva deuda mas que se les daba a los padres de Helios.
No es, hasta sus nueve años, tras tanto tiempo pasando de hogares en hogares diferentes, cuando sus padres encuentran un nuevo hogar donde dormir y quedarse. En un pequeño pueblo a nada de unos kilómetros de Venecia, ciudad donde había nacido.
Las edades de Helios no fueron del todo buenas, bueno, dentro de lo que cabía, tenia donde dormir y eso ya era algo que el mismo agradecía.
A los 15 años de edad, desarrolló por completo lo que en su día llamamos Cleptomania, la afición por tomar algo que no es tuyo bien consciente o bien inconscientemente.
Pero..teniendo una madre señorita de compañía, un padre alcoholizado era lo mejor que podia hacer.
A los 18 años de edad, Helios se había convertido ya en un famoso ladrón de las calles de Venecia, si, porque el mismo se recorria esos kilómetros a pie para llegar a la ciudad y a la noche volver nuevamente a "su infierno".
Días y noches que debía soportar como su padre hacia atrocidades con su madre.
Pero la salvación llegó en nombre de amor, debido a que la hija de unos cárteres de la droga se enamoró de Helios y así hasta los 20 años vivían juntos debido a que el padre de la chica les pagaba la misma casa donde vivir.
Una noche, la cual jamas olvidaría, Helios tomó prestado algo que no era suyo. Un colgante tan importante para su pareja que ese fue el culmen de la noche.
A la mañana siguiente Helios yacía bajo el lecho de su cama con una bala en el pecho, pero...debido a "suerte" un pequeño portal se le hizo frente, dejándose caer a el para poder salir de aquella vida miserable y.. quien sabe..rehacer una nueva
Especie: Brujo
Dones: Cataclyst/Diviner
Edad: 20 años
Bando: Eli (Reina)
Fecha de entrada a Wishville: 16/11/2018
Nombre: Ivanka Mason (OCUPADA)
Avatar: Emma Dumont
Enfermedad Psicológica: Trastorno explosivo intermitente (TEI) y trastorno de identidad disociativo (TID)
Historia: Ivanka tenía 7 años cuando todo comenzó.
Los Mason eran una familia unida pero solo cuando Sarah (ver ficha en brujos) tenía las notas perfectas o era perfecta en lo que fuera que hiciera. Ivanka observaba aquello y no podía evitar cierta falta de atención. Sus padres no solían reparar mucho en ella, volviéndola un poco invisible para ser real.
Sin embargo, ella solía desde chica hacer muchos “roles de fantasía”. Fue haciendo de a poco, otras identidades aunque no todas se habían quedado con ella hasta la actualidad realmente. Sólo una fue destacable e importante desde su niñez, y esa identidad era Lena.
Si Ivanka ya era una persona tranquila y para nada de buscar pleitos, se deben de imaginar que ella era todo su contrario. Le gustaba meter el dedo en la llaga, crear un poco de caos y hasta hacer caprichos para obtener lo que quería. No obstante, todo fue pasando demasiado rápido para que alguien se diera cuenta lo que realmente estaba pasando.
Tardó 5 años, 12 años de edad, más en tener la atención completa de sus padres, y esto solo fue cuando la directora de la escuela habló con los Mason. Su hija había golpeado a un chico hasta romper su nariz, tal chico se había burlado del hermano menor de Ivanka, y ella al estar enfadada, no dudo en hacer aquello. La directora ordenó que fuera llevada a un psicólogo para ser evaluada. TEI, salió en los resultados. La chica era propensa a una vida llena de enojos constantemente, por lo que sus padres decidieron ponerle más atención y mimarla más, pero Sarah no permitió aquello, pero esta vez no fue apropósito, Sarah también fue diagnosticada con su propio trastorno.
Ivanka vivió en las sombras, bajo llave. Nunca detectaron su trastorno de personalidad pues aquello les parecía normal a sus padres. Entendían a través de lo aprendido que era algo nato de ella.
1 año más tarde, 13 años de edad: Sarah no estaba.
El primer año que paso junto a su hermano menor, fue uno de los mejores. Sus padres habían cambiado y sus vidas comenzaban a ser un poco más normales. Ivanka era perfecta en la escuela y su agresividad había disminuido solo un poco incluido la otra identidad que tanto se había manifestado antes ya que todo deseo casi era cumplido. Sé alegraba de que su hermana hubiera decidido irse a estudiar la universidad al otro lado del mundo, eso era lo que sus padres decían constantemente pues jamás supo dónde estaba recluida y el motivo del porque ya no hablaban de ella cómo parte de la familia o por qué muchas veces salían muy temprano todos los viernes – días de visita en el hospital psiquiátrico- y al llegar ninguno de los dos padres decía nada y pasaban un fin de semana en depresión. Todo eso duró 3 años.
3 años más tarde, teniendo 16 años de edad, y aquí fue donde Ivanka sacó el verdadero ser. Un noviazgo que la llevó por el camino de las drogas, aunque esa etapa no duró más que 1 mes pues no eran de su agrado, no causaba el efecto que al golpear a un chico hasta sangrar le dejaba en su rostro de maldad. Andaba con personas nada agradables. Sus padres eran más un caos por lo que los doctores decían de Sarah, pues no estaba mejorando. Joseph ignoraba todo esto y solo creía que era porque la entraban. Su identidad era más evidente. Ese trastorno junto con el TEI era peor aún pues una vez que su otra identidad podría aparecer, la ira que sentía no podría ser controlada dejando a su paso gritos y golpes seguros. Si en la preparatoria ignoraban cosas de ella, lo perfecto que era. Siempre sé desquitaba con alguien. Todo aquello era ignorado por sus padres, pues sabía cómo evitar todo eso.
Quizás, había aprendido tan bien a poder engañar a las personas en poder hacerles creer que lo único que tenía era dolor, sufrimiento e ira acumulado en su interior. Que aquella manía de ser irritable ante lo que no le gustaba, podría ser controlado a través de terapias inútiles. Sin embargo, ella jamás diría que estaba cansada de esa situación ya que odiaba a las personas débiles. Y si ella lo era, ya no tendría por qué vivir.
Cumplía sus 18 años… y se había enterado de que su hermana había muerto en un accidente automovilístico de regreso a su casa. Según sus padres ella vendría a pasar las fiestas de navidad y año nuevo con la familia. Ivanka estaba feliz de que pudiese ver a su hermana, aun cuando no tenía idea del porqué.
Pero nada fue así. Una vez que se enteró: Primero lloró y gritó, destruyó su cuarto y golpeó varias veces a su hermano. Gritó a sus padres y los culpó que ella misma estuviera enferma, de que hubieran mandado a Sarah a estudiar lejos. Sus padres jamás contaron la verdad. No entendía porque le dolía tanto, si Sarah siempre había sido un obstáculo en su vida, si sus padres la amaban más a ella o si todo lo que tuviera que ver con su hermana era perfecto. No sabía porque aquello le dolía y odiaba ese sentimiento porque odiaba el rechazo de su hermana los años que estuvieron juntas.
Pero aquella noche, fue el punto de quiebre. La joven salió de su casa, sabiendo que ya no era la misma chica tranquila que podía escaparse de los problemas y de su ira incontrolable. Su forma de caminar era diferente, nadie podría reconocerla. No aquellas personas que jamás habría escuchado hablar sobre Lena.
Ni siquiera había agarrado algún abrigo con ella, estando congelada hasta los huesos por estar nevando. Fue hasta los callejones del centro, sus amigos habían escuchado la noticia y querían festejar de que al fin sé había librado de la tonta hermana. Pero los planes de su pequeño secreto eran diferentes y salieron a plena vista. Una vez llegó al lugar, se fue directo contra el hombre que vendía la droga y le dio un puñetazo en el rostro, haciéndolo sangrar de inmediato.
— ¿Qué mierda te ocurre, Iv?
Dijo el tipo alto y moreno mientras se detenía el sangrado con una de sus manos. Todos observaron a Ivanka con cara de horror, aquel hombre era quien asesinaba por las calles a la gente que no le pagaba dicha mercancía pero a la chica eso no le importo.
— No seas marica y dame algo de diversión, Zack.
Esa voz irreconocible lo reclamó. La chica y el hombre comenzaron una pelea casi sin fin de golpes. La mujer estaba ya algo masacrada más el moreno estaba de igual forma. No hubo momento en el que ella no dejara de sonreír, y él le veía con furia, por lo que ordenó que la sostuvieran y en ese momento, Iv firmó su sentencia.
Estaba contra la pared, cuando Zack comenzó a golpear una y otra vez el vientre de la chica. La sangre salía por su boca y todos en aquel lugar reían, cómo si ella fuese el motivo y la diversión de todos… Sí, lo estaba siendo pero Iv no creía aquello. Momentos después, una voz la sacó del trance de dolor, volteó hacia su dirección y vio a su hermano al final del callejón. Una mirada de horror la invadió antes de que pudiera gritar que sé largara. Fue en ese momento, donde había reaccionado su parte verdadera. No quería ver a su hermano sufrir por lo miserable que había sido su otra identidad.
Zack aprovechó esto, golpeando su rostro contra la pared, cayendo al instante. Otros dos chicos fueron a por el hermano y Iv observaba aterrada, su vista estaba nublada pero podía ver cómo su hermano forcejeaba, y estos hombres le traían de regreso mientras le golpeaban.
— Zack… por favor.
Rogó la chica. Pero en lugar de que el moreno sé detuviera, comenzó a patear su rostro y el hermano gritaba de desesperación.
— ¡No me vuelvas a dirigir la palabra, perra! — Golpeaba una y otra vez — ¡Gracias por traerme más diversión, esta noche nos vamos a divertir con él!
Sentía la sangre en su garganta, lo cual la estaba ahogando. Los golpes eran lo de menos, era aquel sabor de sangre lo que invadía sus pulmones y sofocaba el poder respirar. Pero antes de que pudiese detener el pie del moreno, una luz la llevo lejos del lugar. Observó cómo rápidamente se iba mientras que gritaba un fuerte “no” pues dejar a su hermano en ese lugar le iba a costar algo más que la vida, aquello no iba a terminar bien pero antes de que pudiese terminar de observar lo que estaban por hacerle, Iv apareció en otro mundo, uno “más tranquilo”, uno alejado de todo aquello que consideraba horrible. Pero ahora más que nunca sentía la necesidad de golpear a quien fuera. Un aura negra la invadió y en ella solo sintió el querer vengarse con sus propias fuerzas de aquellas almas que hacían injusticia. Había llegado a Wishville con el placer de dominar algún don para poder engañar a aquellas personas que se lo merecían.
Especie: Brujo
Dones: Shape Shifter/Evanescent
Edad: 20 años
Bando: Eli (Reina)
Fecha de entrada a Wishville: 29/04/2017
Nombre: Benjamin Holdman (OCUPADO)
Avatar: Dane DeHaan
Enfermedad psicológica: Megalomanía
Historia: Vivió la mayor parte de su infancia con Rørek Dagsson, su padre, un sujeto egocéntrico e incapaz de diferenciar el bien del mal. Aprendió infinitas cosas, tantas que de momento se cuestionó el haberlo delatado con las autoridades por diferentes robos a mano armada, violencia agravada y piromanía, no obstante jamás se arrepintió obteniendo por resultado el ser considerado y tratado como un héroe, después de todo solo era un niño de once años.
Cumplió doce años dentro de un orfanato y nadie lo celebró, de hecho ni él se acordó. Benjamín tenía esa capacidad de engañar a las persona con su envolvente personalidad, su seguridad y habilidad para tratar verbalmente con los demás, esas fueron las razones principales que llevaron a la familia Holdman a adoptarlo. Se le ofreció un apellido, un hogar y una familia pero el pequeño ya no respondía a esos estímulos, demostraba conformidad y felicidad aunque sus pensamientos fueran completamente distintos.
Inició la escuela al poco tiempo rodeándose rápidamente de amigos, o seguidores como él los llamaba, mientras que su delirio de grandeza cobraba fuerza. Era sin duda un ser superior frente a sus ignorantes compañeros pero jamás se los hizo saber, sus pensamientos no serían comprendidos por seres tan pequeños como ellos, todos excepto Diamond. Sin darse cuenta creó un vínculo especial con el menor de la familia Holdman, también adoptado, llegando a sobre protegerlo de todo aquel que intentara dañarle.
Nunca se le diagnosticó un trastorno pero en su interior sabía que no estaba del todo cuerdo, tuvo solo una novia en su adultez pero era totalmente incapaz de tener sentimientos profundos hacia ella, cosa heredada de su padre, sin embargo eso no lo detuvo al mudarse con ella. Una tarde, cuando su pareja no estaba en el apartamento, se detuvo frente al espejo y se cuestionó su vida, por qué continuaba fingiendo algo que no sentía y sin darse cuenta frente a él apareció la entrada a Wishville. Entró sin remordimiento, sin pensar en la reacción de su pareja y familia, simplemente avanzó.
Especie: Brujo
Dones: Evolver
Edad: 30 años
Bando: Eli (Reina)
Fecha de entrada a Wishville: 29/08/2018
Nombre: Rhiannon Synnove de Ely (OCUPADA)
@BrokenSoulWV
Avatar: Katie McGrath
Enfermedad Psicológica: Bipolaridad
Historia: El día de su nacimiento había sido un pequeño rayo de luz en aquel castillo de Anglia, después de tantos años intentando tener un bebé, finalmente los señores del Castillo lo habían conseguido, y para su grata sorpresa eran mellizos: un niño y una niña.
A medida que los dos pequeños se hacían mayores se pudo apreciar que el niño era débil y enfermizo, mientras que su hermana estaba llena de energía y vitalidad, fue ahí cuando la semilla del odio comenzó a crecer en su madre, pues ella siempre había querido un heredero varón que pudiera mantener el nombre de su familia y, sabía que su querido hijo podría fallecer en cualquier momento, quedando solo Rhiannon quien, a su modo de ver, era completamente inútil.
A pesar de todo, la muchacha creció rodeada del amor de su padre y de su hermano, este último era quien siempre intercedía por ella cuando su madre se sobrepasaba, ya que el menor de los mellizos era el niño de los ojos de su madre y ella jamás le llevaba la contraria, quizás también el miedo a que un disgusto empeorase el estado de salud de su hijo ayudaba.
Ambos hermanos crecieron con los mejores tutores que sus padres encontraron, fueron instruidos en diversos idiomas, historia y música, también tenían clases de equitación, pero pronto se vio que el niño no podía aguantar demasiado y tuvo que abandonarlo, al igual que toda actividad que incluyera un mínimo de esfuerzo físico, incluyendo eso todo tipo de adiestramiento para la batalla que, con todas las guerras que había, era algo sumamente necesario.
Un día Rhiannon estaba sentada en la ventana de la habitación de su hermano, ambos observando como los jóvenes entrenaban en la patio, el anhelo brillando en los ojos de los mellizos ante el conocimiento de que ninguno, por una razón y otra, podría jamás estar ahí, aunque esto no sería del todo cierto, al menos no para ella. Una de tantas veces que se escabullía para observar de cerca como los futuros caballeros pulían su técnica con la espada, su padre la vio y no tardó en ir hasta ella y preguntarle, la niña no estaba preocupada por si él la regañaba, sabía que eso no iba a suceder, pues mientras que su madre solo tenía ojos para su hermano, ella era la predilecta de su padre ¿el problema?
Él estaba totalmente subyugado a los deseos de su esposa, todo aquel que residía en el castillo era consciente de que no era otra, sino su madre, la que gobernaba aquellas tierras. Pese a todo, y para gran sorpresa de la pequeña, su padre decidió darle algunas clases secretas. Ella no cabía en sí de gozo, sabría como era manejar armas en vez de centrarse en tareas absurdas, pero aquella felicidad apenas duró, pues casi un mes después su madre comenzó a sospechar de que algo ocurría y pensaba averiguar que era. Así lo hizo, un día siguió a su hija todo el día, hasta descubrir el adiestramiento secreto que su marido proporcionaba a la niña, decir que se enfureció era poco, esa fue la primera vez que la pequeña recibió una paliza de parte de su madre y, como si esta solo hubiera sido un detonador, muchas otras le siguieron.
Ese fue el punto de inflexión donde lo peor comenzó, cada vez eran más frecuentes los ataques de su madre, tanto físicos como psicológicos, que iban mermando la alegría de la joven cada vez más, y a la par que la suya, también la de su hermano, hecho por el que obviamente era culpable, al menos desde el punto de vista de la señora del castillo.
Así pasaron los años, la joven centrándose en sus aficiones y cuidar de su mellizo mientras pretendía ignorar los constantes abusos de su madre, le afectaba, por supuesto que lo hacía, pero debía mantenerse fuerte, si no era por sí misma, lo haría por su hermano.
Justo cuando pensaba que no podría empeorar su situación, recibió una noticia, sus padres iban a enviar a su hermano junto a unos curanderos que quizás podrían hacer algo con su estado, pero el proceso llevaría años, lo que quería decir que ella estaría sola, y sabía que era egoísta, que debía alegrarse por su hermano, pero no era capaz, se pasó la noche antes a que su mellizo se fuera lejos despierta junto a su lecho, las lágrimas derramándose ante lo que venía ahora.
Había pasado una semana desde la partida de su mellizo y su humor no mejoraba, era casi un alma en pena por los pasillos del castillo, había dejado desantendido incluso a su caballo, los abusos de su madre como algo tan común, ahora su mente solo le daba vueltas a que debería haber hecho algo para detener todo eso, o haberse ido con su hermano.
Su madre se centró mucho más en ella ahora que su heredero no estaba, claro que no era bueno tener su atención, mucho menos el día que la llamó al gran salón y le presentó a su prometido, noticia que le cayó a la joven como un cubo de agua helada ¿prometido? Sabía que tarde o temprano tendría que casarse, pero no esperaba que eso fuera ya. Pero sabía porqué su madre lo había hecho en ese momento, ella rara vez se quedaba callada si están en desacuerdo con algo ¿pero ahora? Ahora apenas le importaba su vida, pero la señora del castillo adoraba el dinero y fue únicamente por este que impidió que su hija se quitara la vida, pues de otro modo estaría sumamente feliz de verla muerta.
La boda no tardó en llegar, y con ella la anhelada dote de su madre, la que la familia del novio había pagado por ella. La joven, que ya por aquel entonces había cumplido los diecisiete, apenas recordaba ese día, mucho menos la noche que siguió, prefería borrar todo de su memoria, era más fácil así.
De ese modo pasaron tres años en los que tuvo que aguantar que su marido la tomara noche sí y noche también, teniendo que aguantar luego sus enfados debido a la falta evidente de heredero, al parecer ella tenía la misma condición que su madre y se le haría extremadamente complicado concebir, y aunque se repetía que no era su culpa a veces era difícil creerlo.
Aunque nunca había llegado a sentir el mínimo rastro de amor por su esposo, si que se había ganado el cariño de muchos de los criados, que la cuidaban en sus peores etapas y compartían con ella las mejores, aquellas donde retomaba sus pasiones, leía todos los días y se iba todas las tardes a montar, algunos decían que era como vivir con dos personas diferentes.
En el verano de 686, poco después de cumplir ella los veintiuno, estaba sentada en el césped junto a una de sus damas de compañía, hablando tranquilamente cuando sintió la primera patada de su ya abultado vientre, aquello la llenó de una alegría solo compara de cuando supo que llevaba un bebé dentro. Su hijo nació aquel otoño, se respiraba alegría en todo el castillo con la noticia, finalmente un heredero había nacido, pero como siempre, la felicidad duraba muy poco, pues su marido se volvió desconfiado y paranoico, ella sabía que pensaba que el niño era un bastardo, hecho que no era cierto, pero no había modo de sacárselo de la cabeza.
A pesar de todo, transcurrieron un par de meses relativamente tranquilos hasta que todo explotó una noche, ella estaba dando el pecho a su pequeño cuando su esposo irrumpió furioso en la estancia, haciendo que ella se incorporase dejando a su bebé en la cuna y poniéndose delante de forma protectora. No supo muy bien que pasó en los próximos minutos, solo que de un momento a otro su marido quería dañar a su hijo y al siguiente estaba en el suelo con una daga en la garganta. Rhiannon no se quedó ahí, apenas tardó en tomar a su bebé en brazos e ir corriendo a los establos, no quería saber que pasaría si alguien se enteran de lo que acababa de ocurrir. Se montó en su caballo mientras sujetaba a su bebé con todas las fuerzas que poseía y rápidamente se puso en camino al castillo de sus padres, fue el único lugar que se le ocurrió para cobijarse. Le llevó casi un día de viaje llegar, pero lo consiguió y, agotada llamó a las puertas, siendo recibida por algunos criados que la reconocieron rápidamente a pesar del tiempo que llevaba sin ir. Permitió que unas mujeres se ocuparan de su hijo mientras ella se iba a hablar con su madre. Contra todo lo que ella había imaginado, sus padres la ayudaron sin una protesta ¿habría cambiado su madre? No lo sabía, pero sería algo que agradecería.
Incluso con la aparente ayuda que tenía, volvió a caer en una espiral de desesperación, sin ganas de hacer nada, llegando incluso a descuidar a su hijo, momento que su madre aprovechó para encargarse de él, llegando incluso a presentarlo como su propio hijo en actos públicos, claro que ella no estaba enterada de nada, y no lo estaría hasta que su madre decidiera echarla de allí. Este momento no tardó en llegar, cuando su pequeño tenía ya un año y ella seguía con aquella dejadez ante la vida, su madre decidió mandarla lejos, a un sitio parecido al que cuatro años atrás habían enviado a su hermano, pero mucho peor.
Fueron cinco años los que pasó ahí recluida, sufriendo todo tipo de abusos de diversas personas, llegando a tal punto que parecía un muñeco, simplemente existía, apenas comía ni dormía, a veces ni siquiera sabía cómo no estaba muerta.
El invierno tras cumplir veintisiete años la dejaron salir ¿la razón? No lo sabía, solo le habían dicho que el Lord había dado la orden, pero ella sabía perfectamente que su padre era una mera marioneta de su madre, y no había razón para que ella le permitiera salir de allí, pero no dejó pasar la oportunidad y regresó a su hogar de la infancia, su único deseo era ver a su hijo.
Ya era noche cerrada para el momento que se plantó delante de las puertas y llamó, escuchando voces hablar antes de que el gran portón se abriera, dejando ver la figura de su madre, algo que la extrañó en un principio, aunque todo cobró sentido cuando la tomó con fuerza por sus delgados brazos, clavándole las uñas profundamente en la piel mientras le soltaba las palabras más dolorosas que jamás había escuchado.
Cuando las puertas se cerraron frente a sus llorosos ojos solo podía pensar en que estaba sola, su padre había muerto y su pequeño ni siquiera la recordaba, pensaba que su madre era alguien muy diferente, eso era algo que no podía soportar, su madre finalmente había conseguido lo que siempre había anhelado. Se movió casi sin notarlo, yendo hacia un acantilado cercano y quedándose durante horas de pie al borde de este, era una noche tormentosa, justo como cuando ella había nacido, había algo poético en todo aquello.
Fue así que, con la salida del sol, Rhiannon se dejó caer, ya sin ninguna razón para vivir, y quizás, solo quizás, si hubiera esperado unas horas más, habría visto a su hermano regresar a la casa y desterrar a su madre por hacer eso, pero no lo hizo, y ahora iba al encuentro con una muerte que jamás llegó, ya que el quiebre de su mente abrió un portal hacia Whisville.
Especie: Bruja
Dones: Necromancer/Evanescent
Edad: 27 años
Bando: Dylan (Rey)
Fecha de entrada a Wishville: 27/12/693
Nombre: Freya (OCUPADA)
@dxrkwitch_wv
Avatar: Victoria Pedretti
Enfermedad Psicológica: Trastorno de Identidad Disociativo y Trastorno de estrés postraumático
Historia: Freya cerró los ojos, dejándose envolver por el vaivén de las olas en la costa. Wishville hacía que el agua supiera a sal, lágrimas y un poco de magia. Tenía miedo. La manera en la que temblaba no era normal, como si le estuvieran arrebatando la vida. Todavía podía escuchar sus voces, sus gritos de sufrimiento.
Dos brujos poco experimentados metieron sus manos donde no debían, donde se les había advertido que no tenían cabida. Su imprudencia podría haber sido perdonada, de no ser porque por poco y acaban con la vida del producto de su amor. Una niña de doce años no tendría que ver a sus padres morir de una manera tan grotesca, a manos de un demonio que invocaron sus ingenuas lenguas.
La menor era feliz a su lado. Su madre le preparaba tartas todos los días, y su padre estaba aprendiendo a peinar su corto cabello. Ella lo prefería así porque no se le enmarañaba en las ramas del bosque y tampoco tardaba en secar.
No esperaba que por la noche las sombras los atacaran. Ella estaba indefensa; a duras penas había escapado con la ayuda de su madre. No era una bruja completa y probablemente jamás lo sería si no se apresuraba. Corrió durante tanto tiempo sin mirar atrás, que los pies le sangraban y tenía las rodillas hechas un desastre por la cantidad de veces que había tropezado. Su madre había abierto un portal y le había pedido que no se detuviera por nada en el mundo. Freya era obediente por primera vez en su vida, y aunque sabía que se acercaba al mar, no paró. Le habían hablado de una isla llena de hadas y elfos al otro lado de este, separada de todo Wishville. Ahí estaría a salvo.
Cuando sus pies tocaron el agua soltó un quejido; ardía mucho, como si le estuvieran echando ácido. Eso, sin embargo, no la detuvo. Avanzó entre las olas, tratando de nadar lo mejor que podía y dejándose arrastrar mar adentro. Tenía frío, pero el miedo prevalecía. Necesitaba seguir huyendo; seguramente el demonio ya la había encontrado.
Tragó tanta agua que en algún momento dejó de ser capaz de mantenerse a flote por su cuenta y se desvaneció. Imaginó que iría al cielo, o a la dimensión espiritual con sus padres, por supuesto.
El destino tenía otros planes.
Minutos después, el mar escupió a la niña a la orilla, como si la considerara poco digna de morir entre sus despiadadas manos. Estaba viva; a duras penas. Pero vivía. Solo necesitaba que alguien la encontrara antes de que fuera tarde.
xPersonalidades:
Freya: Porta el don Evolver. Freya es una persona dulce, pero bastante insegura. Tiende a ser bastante cobarde y callada. Es más, se le puede confundir con una persona muda, puesto que debido al impacto de la muerte de sus padres sus cuerdas vocales se paralizaron durante varias semanas. Aunque pronto pudo volver a usarlas, se siente bastante inquieta cuando habla. Cree que los demonios la persiguen, así que prefiere no decir mucho y comunicarse con notas. Es la personalidad que sufre con mayor fuerza el PTSD.
Alicia: Porta el don Diviner. Es la personalidad protectora y valiente que nace a partir del trauma de perder a sus padres de una manera violenta sin poder hacer nada para impedirlo.
Especie: Brujo
Dones: Diviner/Evolver
Edad: 23 años
Bando: Eli (Reina)
Fecha de nacimiento: 14/09/2019
Nombre: Thomas Rhys (OCUPADO)
@TomRhys_WV
Avatar: Tom Hiddleston
Enfermedad Psicológica: Esquizofrenia
Historia: Frío, dolor, duro. Frío, dolor, duro se repetía una y otra vez mientras tiritaba en un barco de la cruz roja y veía como la costa se mostraba imponente, acercándose lentamente y mostrando refugio para el joven inglés.
—Muy bien... Nombre.--
El chico le miró aterrado, mientras intentaba reconocer las palabras que salían de la boca del voluntario.
—T-To-Tom... Thomas— Murmuró al fin, mientras el voluntario sonreía cariñoso y tomaba aire.
—¿Apellido?— Susurró un tanto más amigable.
—R-Rhys— El frío no le permitía hablar con claridad y la combinación con el ataque de un huracán complicaban más el asunto.
—Bien, Thomas. Sigue hacia la carpa de refugiados, allí te ubicarán y regresarás a casa.
Todo el camino hacia la carpa, el chico no pudo pensar en nada más que los rostros aterrados de su familia segundos antes de su muerte. Hecho que estuvo a segundos de evitar, pero 2 centímetros de distancia entre la mano de su padre y la suya le concedieron la derrota.
"—No te aflijas, tampoco hubieras hecho mucho si lo atrapabas—" Susurró una voz unos años después, mientras Tom se encontraba en una esquina de un apartamento vacío con una carga pesada de cocaína en la sangre.
—Aún así, quisiera haberlo probado...— Respondió a la voz, mientras otra respuesta femenina reía al fondo.
"—Mira, eso es el peor de los consuelos, amigo—" Divagó ante aquella idea y sonrió divertido mientras sus erráticos movimientos mostraban lo muy drogado que estaba.
—Puede ser un mal consuelo, pero me hubiese gustado— Se levantó del suelo y caminó a trompicones hasta un colchón tirado en medio de la sala, para mirar por su ventana al exterior y ver una bella muchacha tomando fotos.
"—Es guapa, pero tu eres un inútil. Ni lo creas—" Rodó los ojos y mandó a callar una de sus voces, para acercarse a la ventana y admirarla.
—Tiene cara de llamarse Charllote— murmuró con una sonrisa torcida, para acariciar esa pequeña imagen a través de su cristal.
Día y noche pensaba en Charllote. La joven chica que frecuentaba el parque frente a su casa y tenía una hermosa sonrisa.
De vez en cuando la veía recorrer las silenciosas habitaciones de su casa y reír en la cocina, pero desaparecía en cuanto el intentaba acercarse; por lo que algo se rompía cada vez que descubría que era una ilusión.
"—Tom, basta. ¿Cómo piensas acercarte a ella? ¿Te hablaría?—" Preguntó en voz alta a la imagen de sí mismo que veía sentada en el gran colchón, mientras ésta caminaba lentamente hacia la ventana y esperaba ansioso por verla.
—Sonreirá para mí. Lo sé— Comentó con una sonrisa traviesa a su otro yo, para guiñarle el ojo y ver como éste desaparecía.
—Oh, ¡Vamos! Ahora si desapareces— Sonrió divertido al lugar donde antes se veía a sí mismo y se preparó con una lata de maíz vieja para su sesión diaria de vista a la bella Charllote.
Después de unos 11 meses de admirar por la ventana como la princesa de sus sueños fotografiaba a los sujetos del parque, Tom empezó a salir de su apartamento y contabilizar las acciones de la chica, siguiéndola a su estudio, su trabajo y su casa. Cada día parecía ser más guapa que el anterior y concordaba con sus acompañantes.
"—Bien, ya sabemos todo de ella... ¿Cuando le vas a hablar?—" Preguntó Mikey, una de las voces que le hablaba.
—Bueno... Eso es un poco más complicado— Susurró viendo la chica desde su auto.
"—¡Vamos, Tom! Preguntale la hora"— corroboró Allsye, la otra voz femenina que escuchaba y, sinceramente, era más amigable.
—¿La hora? ¿Quieres que me acerque y le diga "Disculpa. ¿Tienes horas?"— Allsye asintió mientras su otro yo, sentado a su lado, asentía sin dejar de ver a Charllote.
Llevaba unas 5 calles detrás de la chica, para finalmente acercarse en una parada para un cruce peatonal y llamar su atención.
—D-disculpa, ¿T-Tienes la hora? Mi reloj ha dejado de f-funcionar...--
"—Eso fue demasiado estúpido.—" Gritó una de sus voces mientras reía a carcajadas y el hombre intentaba concentrarse en las palabras de la chica.
—¿D-disculpa?— Tuvo que decir finalmente.
—No hay problema. Son las 11 de la mañana.— La chica sonrió y pasó la calle, mientras el hombre asentía mirándola hipnotizado.
"—Bien, eso salió peor de lo que esperábamos—" Comentó Tom a su lado, mientras le palmeaba la espalda.
—Bien, todo el mundo acérquese— Gritó en la mitad del parque, para sacar una baraja de cartas y sonreír divertido.
—¿A quién le gustan las apuestas?— La multitud sonrió y se acercó aún más, cayendo en los engaños de aquel habilidoso carterista.
—Bien, ¿Voluntarios?— Varios hombres levantaron la mano, para ser analizados por el inglés y escoger el que tuviese más artilugios caros encima.
—Bien, tendré que encontrar la reina de corazones.— Entregó la carta en la mano del hombre, aún con su sonrisa triunfal. Desde ya sabía que estaba ganando. —Escriba su cédula en la carta y escóndala. Si no logró encontrarla, usted ganará 20 dólares. Si yo logro tener la carta en mi mano antes de un minuto, se irá con las manos vacías— Tom sonrió frente suyo, mientras miraba sus bolsillos con curiosidad.
—De acuerdo— Dijo el hombre confiado, pero los trucos del carterista eran infinitos... Hasta que Tom lo distraía.
—Tom, basta— Susurró mirando a su otro yo que sacaba y metía las cosas del hombre en sus bolsillos.
—¿Cómo dijo?— El inglés lo miró y sonrió, para hacer un gesto que indicaba que el truco empezaba.
50 segundos después, Tom se encontraba sacando la carta de su bolsillo que, efectivamente tenía el número de cédula del hombre. Todo el mundo aplaudió y muchos rieron, mientras el chico pasaba por cada uno y hacía otras maromas de mago, que en realidad era una mera distracción para sacar relojes y dinero de entre sus víctimas.
10 años haciendo esto y la gente todavía no aprendía.
Su vida siempre había rozado la normalidad, pero ahora ya no sabía lo que sucedía. El descontrol lo dominaba y Tom solía salirse con la suya haciendo y deshaciendo, para meterlo en cuanto problema había, pero esta vez había ido muy lejos.
Ahora, Charllotte estaba encadenada en la habitación contigua y ya había tocado su piel. Era lo más cercano a la realidad que podía hacer.
—¿¡Cómo se te ocurrió algo así, Tom?!— Chilló con una mano en su frente.
"—Vamos, Rhys... Tu querías hablarle...—" Pateó una piedrita avergonzado y desapareció.
Se acercó a la chica y tocó su mejilla, mientras ella lloraba y tiritaba de miedo. Estaba tan enamorado de ella que no podía concebir verla llorar.
—¡No voy a hacerte daño! Al menos yo no...— Miró a Tom de reojo, que volvía a pasearse y negó. —De él no puedo decir nada— Confesó señalando al sujeto, para recibir la mirada confundida.
—¿D-de Qui-quién?— Dijo entre sollozos la chica, mientras miraba donde señalaba el hombre.
—Déjalo. Es algo tímido— Susurró, para verla sonreír y pronunciar su nombre en su bella voz. Llevaba tanto tiempo queriendo tenerla que verla enfrente le descontrolaba por completo.
"—Ve y arrúinalo, idiota—" Gritó una nueva voz.
"—Tom, concentrate en Charllotte—" Susurró Allsye, sentándose al lado de la chica, por lo que asintió. La chica ya no sonreía. Ya no estaba ahí.
Rápidamente se levantó a buscarla, para escuchar sus sollozos en la esquina.
—¿Q-qué quieres de mi?— Lloró atada a la pared, por lo que el retrocedió sus pasos y la tocó.
"—Bésala—" Dijo Tom, a su lado con una sonrisa divertida.
—¡Claro que no!— Pero él no escuchó y tomó su suave piel para dejar un beso suave en sus labios y dejar atónito al hombre. Charllotte se mantuvo quieta y sollozando, mientras él notaba que tenía ese angelical rostro en sus manos. Podía jurar que había sido Tom...
No tenía idea de cuanto había pasado, pero Charllotte ya parecía ser la nueva habitante oficial de su desdeñoso apartamento. Resulta que era más agradable de lo que creía. Últimamente había visto su accidente más veces de lo normal y estaba muy afectado, pero siempre tenía el tierno cuerpo de Charllotte para refugiarse, aunque parece que ese día algo no iba bien.
Otra vez estaba en aquel crucero vacacional, sosteniendo la mano de su hermana y admirando como su hermano hacía maromas con las bebidas.
—No seré mago como Tom, pero también hago buenos trucos— Sonrió abiertamente, mientras Allsye negaba divertida.
—Mikey siempre será muy malo con sus "trucos"— Aclaró, mientras recibía un baño de agua. Mikey se había equivocado de nuevo.
Cuando ella quiso explotar en cólera, el cielo gruñó y se oscureció más para anunciar una terrible tormenta, pero ya era muy tarde. Pronto Tom vio como su hermana se deslizaba por la cubierta el barco y quedaba sostenida sólo de una barra de metal.
—¡Thomas!— Gritaba presa del pánico, mientras Tom quitaba uno a uno los dedos de su hermana de la barra.
—Lo siento... Hoy debes morir— Y así, tomó ambas manos de la chica y la lanzó al mar.
Tom volvió a la realidad con los desesperados gritos de Charllotte, pero Mikey la silenció llamándolo desde el otro lado.
Tom caminó hasta allá para volver al barco ver a su hermano, que batallaba contra una gran herida en su vientre.
—A-ayúdame, Tommy— Susurró al verle, pero Tom simplemente tomó el metal y lo hundió hasta atravesar al chiquillo.
—Sólo uno saldrá vivo y ese soy yo— Susurró viendo como su padre colgaba de los restos del mástil, para levantar la mano y despedirse y luego verlo caer.
Tom gritaba a su otro yo para acabar la escena y ayudar a su familia, pero todo parecía en vano.
—¡Tom!— Oía la voz de Charllotte a lo lejos, mientras el corría en rescate, pero era inútil. La imagen se alejaba de él. Todo se alejaba hasta que cayó al agua y mojó completamente su ropa.
Al levantar la mirada, vio que realmente estaba en un lago, pero eso no era Yucatán, ni Inglaterra. ¿Dónde estaba?
Especie: Brujo
Dones: Shape Shifter/Necromancer
Edad: 35 años
Bando: Dylan (Rey)
Fecha de entrada a Wishville: 28/02/1991
Nombre: Lassery Thirlwall (OCUPADA)
@Lassery_WV
Avatar: Jade Thirlwall
Enfermedad Psicológica: Trastorno de ansiedad social (TAS)
Historia: La pequeña Lassery solo tenía unos pocos 5 años cuando conoció un parque con zonas de juegos para niños como ella.
La niña vivía a las afueras de París, en Francia, con sus dos padres en un campo. La pareja no era tan adinerada como para complacer a su pequeña, por lo cual, ahorrando con mucho esfuerzo le regalaron por sus 5 años un viaje en familia al centro de París.
En una vieja camioneta con destino a la ciudad, Lassery movía sus cortas piernitas que colgaban al no llegar al suelo. Estaba feliz, siempre quiso conocer el centro de aquella ciudad y ver la preciosa torre Eiffel, que solamente la conoció por medio de fotos del libro en su pequeña escuela también a las afueras. Sus padres, felices al ver la reluciente sonrisa en la cara de su hija, la llevaron a un parque y caminaron hasta la zona de juegos.
Parecía que a Lassery le salían estrellas de sus ojos al ver los toboganes, los columpios, y muchos juegos más que ella no conocía, y lo más impresionante, la cantidad de niños ahí era incontable. La pequeña corrió hacia los juegos soltando risas emocionadas, nunca vio a tantos niños y niñas, y quería hacerse amigos para jugar con ellos. Llegó hasta una casita de plástico a su tamaño, dentro y alrededor había niñas jugando a "La mamá, el papá y sus hijas", Lassery se acercó a ellas, mostrando una sonrisa con un huequito por su diente caído.
—¿Puedo jugar con ustedes?
Las niñas pararon su fantasía, y la miraron por unos segundos en completo silencio, para después, todas ellas retrocedieron alejándose de Lassery, menos una, pero le dijo "niña sucia y pobre". Aquella chica soltó con veneno esas palabras, confundiendo y lastimando a Lass. La pequeña solo llevaba una remera gris y un jardinero, miró a la otra niña, polera blanca, un peinado perfecto y una hermosa remera. Las niñas comenzaron a empujarla hasta que cae al suelo y en sus ojitos comenzaron a humedecerse.
Lo siguiente pasó tan rápido pero a la vez tan lento. Su padre había corrido en su ayuda, pero otro padre de las niñas comenzó a agredirlo y así comenzó una pelea que terminó a golpes. La policía se llevó solamente a su padre y su madre quedó en un estado de frustración por la situación, sumado a que ahora ella sola se tendrá que hacer cargo del campo. Lassery recuerda perfectamente a su padre siendo llevado por la policía a la fuerza sin dejarle declarar nada. Desde ese día, la pequeña de 5 años recién cumplidos comenzó a tenerle miedo a los niños y a los adultos.
Pasó una infancia alejándose de las personas, evitó lo más que pudo a sus compañeritos de la escuela y se la pasaba jugando con los nuevos potrillos de los caballos. A los 11 años, 6 años después de que se llevaron a su padre, un día su madre entró a la casa con un bebé pelirrojo envuelto en mantas en sus brazos. Su madre agradecía haber escuchado el llanto del bebé detrás del gallinero, porque si el bebé no hubiera llorado, la mujer no quería imaginar en las condiciones que lo encontraría.
Fue difícil, pero pudieron criar al bebé entre las dos, bautizándolo con el nombre de Jace La pequeña Lassery vio tanta ternura en su nuevo hermanito que lo cuidó mucho, evitándole problemas con las personas y enseñarle todo lo que estaba bien y mal. Para cuando la niña estuvo en la secundaria, encontró su pasión en las matemáticas, quedándose en su salón cuando era el descanso para completar todo un libro de problemas matemáticos sin ninguna ayuda. Varias personas intentaron acercarse a ella, ya sea para conocerse o simplemente para que los ayude en matemática. Pero Lassery comenzaba a temblar, tartamudeaba y corría lo más lejos de esas personas. Comenzó así a encerrarse en ella misma, rodeada de libros, ya sean historias de todo tipo, hasta números y biología. Por curiosidad leyó un libro de físico química, y con tan solo las primeras páginas desarrolló otro amor por la ciencia, terminando por leer todo libro de químicos y experimentos que no tardó en hacerlos. Sus favoritos eran los eléctricos, desde prender una bombilla con pocos elementos reciclables hasta extraños robots.
Para cuando cumplió sus 19, el cielo estaba nublado ese día, caminando al mercado siguiendo los poste de madera que dirigían los cables del generador eléctrico, se encontró con sus viejos compañeros de primaria. Ellos no tardaron en acercarse, Lassery comenzó a sentir miedo, mucho miedo. No supo identificar sus expresiones, si eran de felicidad o siniestra. La tomaron del brazo y ella gritó de puro instinto, moviéndose lo mejor que podía para alejarse de ellos. La inmovilizaron y sintió su cabeza a punto de explotar. Pero la lluvia hizo acto de presencia y algunos cables estaban pelados por sobre ellos, las chispas saltaron y sus ex compañeros la soltaron al correr para protegerse. Lassery no podía moverse de lo temblorosa que estaba, la lluvia cayendo sobre ella acompañada de innumerables chispas para terminar de electrocutarla. Así su puerta a Wishville fue abierta.
Especie: Brujo
Dones: Diviner/Illusionist
Edad: 19 años
Bando: Dylan (Rey)
Fecha de entrada a Wishville: 13/11/2017
Nombre: Hela (Ella) Vinter (OCUPADA)
@LadyDeath_Wv
Avatar: Alicia Vikander
Enfermedad Psicológica: Esquizofrenia
Historia: "¿Y si los demonios fuesen reales?". La pequeña y curiosa Hela repetía esa pregunta día sí y noche también. Cuando cuidaba de la granja, cuando recolectaba hortalizas o incluso cuando atendían a enfermos en su hogar —siempre en voz baja, por supuesto—. La diana de aquella recurrente pregunta siempre era su querida madre, Anelise. Siempre.
La mujer, sin embargo, le respondía con risas y miradas dulces. Le demostraba así que no eran más que historias que se contaban en la plaza del pueblo para asustar a los niños. Aunque más que causar terror, a Hela le despertaba un profundo interés.
Pronto fue rechazada por los demás niños del lugar, los cuales la tacharon de extraña e inquietante. Ella —tal y como la llamaba su madre—, se vio viviendo una infancia en solitario, acompañada únicamente de su madre y aquellos que acudían a lo alto de la colina buscando un remedio a sus males. Sí, su madre era una de las pocas curanderas que aún perduraban por aquellas tierras norteñas alejadas de los contaminados centros urbanos.
Un día, con tan solo doce años, sus puntiagudos zapatos se toparon con el inerte cuerpo de un cuervo. Ella se agachó, tratando de dilucidar si aquel pequeño ser no se volvería a mover jamás. No, aquello no era posible. ¿Por qué? Simplemente, porque Ella se lo imaginaba moviéndose. Y justo cuando formuló aquel pensamiento, el ave sufrió un espasmo. La niña no se asustó. Tan sólo rió alegremente. ¡Tenía razón!
Lo que Ella no sabía era que había abierto una puerta muy peligrosa en su interior, en su mente: la puerta de la esquizofrenia.
La niña vivaz de cabellos acaramelados pronto comenzó a experimentar extraños episodios en los que figuras se le aparecían y le susurraban inquietantes mensajes. Le aseguraban que aquella realidad era deleznable, triste y … Debía huir de ella a toda costa.
Su madre Anelise fue la primera enterada, y al principio no le dio mayor importancia. ¿Qué niño solitario no se inventaba amigos invisibles? ¿Qué niño no querría ir a un mundo lleno de fantasía?
Sin embargo, conforme Ella se fue haciendo mayor, mayores se hicieron también las ilusiones que se creaban en su enferma mente.
Un día, desgraciadamente, aquellas figuras informes le susurraron que había llegado el día de escapar de allí y ponerle fin al sufrimiento de sus seres queridos. Así, entrada en una especie de trance, Ella sesgó la vida de su madre. Extinguió su cálida y dulce sonrisa … Para siempre.
Al día siguiente, cuando la muchacha pudo ser consciente de lo que había sido capaz de acometer, entró en un estado de pánico extremo. Las paredes de la angustiosa realidad se le echaron encima y se vio atrapada, asfixiada por ellas. Gritó, chilló y arañó sus asesinas manos.
Pero tan pronto como se le echaron encima, desaparecieron, descubriéndole Wishville en un abrir y cerrar de ojos.
Especie: Brujo
Dones: Necromancer/Diviner
Edad: 21 años
Bando: Eli (Reina)
Fecha de entrada a Wishville: 18/04/2018
Nombre: Hannele Aizman Vinter (OCUPADA)
@DragonSoulWV
Avatar: Jessica Clements
Enfermedad Psicológica: TOC y Cleptomanía
Historia: Se dice que no existe mal que por bien no venga, aunque sea una expresión que en momentos oscuros uno no quiera oír o comprenda realmente.
Estando atrapados en la dimensión espiritual, no solamente los habitantes de Wishville conectaron con el más allá, también dos almas que venían cargadas con sus propios problemas y pasados. En medio del caos y la incertidumbre lograron pasar la más dura de las pruebas, aquella con la que se dieron cuenta de que las piezas que creían rotas de cada uno, las perdidas antaño y las obsequiadas a otros encajaban perfectamente como un solo mecanismo.
No fue el primer ni el último obstáculo, pero seguramente si aquel con el que decidieron que valía la pena luchar por el otro, por los dos y por el destello de lo que parecía ser más grande y valioso que lo pensado a primera vista.
Los meses siguientes se transformaron en tinta plasmando su historia, buenos y malos momentos superados de la mano que decidieron converger en su primer retoño.
Se trató primero solamente de una visión por parte de Hela, una conversación con Ryu que tuvo que quedar pendiente por circunstancias ocurridas en Wishville que incluyeron demonios, pero que una vez de regreso a la normalidad pudo compartir.
En ella aparecía el dragón en un jardín, enseñando mariposas a una niña que sonreía con todo y ojos que Hela supo en su corazón que sería la hija de ambos.
Los miedos volvieron a atacar. Si bien el anhelo de ser madre era fuerte, en un pasado su embarazo no tuvo su final feliz. Venía un segundo “pero”, uno de parte del dragón y es que debía pasar por la aprobación de Sammuel ya que no era el único dueño del cuerpo.
Las piezas, sin embargo, volvieron a encajar sin mayores dificultades y el miedo se reemplazó por ansias, expectación y un poco de impaciencia ya que ambos no veían el momento de tener a su pequeña en brazos, de amarla con cada latido de sus corazones.
Especie: Brujo
Dones: Evanescent/Shape Shifter
Padres: Hela (Bruja) y Ryu (Metamorfo)
Edad: 18 años (En crecimiento)
Bando: Eli (Reina)
Fecha de nacimiento: 21/09/2019
Nombre: Zeth (OCUPADO)
@zeth_wv
Avatar: Avan Jogia
Enfermedad Psicológica: Narcisismo (Anteriormente) Autofobia (Actual)
Historia: Es posible que la vida de zeth no haya sido más que un sarcófago solitario y lleno de mentiras, uno que solo podía ser desenterrado por ella.
Desde pequeño, Zeth fue incapaz de mantener una buena relación con otros niños de su misma edad, a menudo terminaba envuelto en peleas y discusiones que lo llevaban a reprensiones por parte de figuras autoritarias, muchas de las cuales tendía a insultar. Este comportamiento no era mas que el producto de zeth al no compartir las mismas opiniones y actividades de los demás: deportes, libros, series dramáticas adolescentes, y un sinfín de cosas más, eran una pérdida de tiempo para él, no encontraba felicidad ni diversión alguna en ello, por otro lado, veía aquellas actividades como “el intento de los idiotas por sentirse adultos”.
Aunque la vida de zeth pareciese bastante solitaria, esto no era del todo cierto, al menos no para las otras personas, desde niño pudo contar con padres y amigos que pasaban sus ratos libres con él, pero aunque aquello fuese así, algo dentro de zeth no le permitía sentirse cómodo con su vida, el mundo era una máquina y, desafortunadamente para él, no era parte de su sistema, estaba solo e incomprendido dentro de un artilugio que no le permitía encajar en la sociedad.
Los años pasaron y el rechazo le afectaba cada vez más, su desespero lo llevo al cambio, y ese cambio a la mentira, zeth comenzó a fingir sus opiniones, sonreír a quienes mas odiaba y a realizar actividades que no disfrutaba, gracias a esto su vida tomo un giro, las personas se amontonaban para escuchar y reír con sus burlas, mientras que otros esperaban pacientemente sus consejos, algunos dirían que este cambio fue para bien, pero aunque aquello fuese así, zeth continuaba mirando el oscuro techo por las noches, preguntándose una y otra vez si realmente estaba solo en el mundo, los placeres momentáneos no eran suficientes, zeth buscaba la felicidad al lado de alguien que pensara igual que él, sin eso, el vivia una muerte en vida.
Su fanatismo por lo irreal y extraordinario, tales como la fantasía y la ficción, lo llevo a adquirir un extraño gusto por la ciencia. Estudio diversos campos: matemáticas, física, química, e incluso hasta medicina, el problema es que zeth no era un genio, tenia que estudiar el doble que los demás para entender los numerosos temas que se le presentaban, sin embargo, había un solo tema en el que logro destacar mas que los demás, la informática. A través de los años, la programación paso de ser su hobby a su profesión, y esto lo llevo a formar parte de un nuevo proyecto.
Zeth fue elegido para uno de los grupos informáticos para cuando el proyecto comenzó, allí una extraña chica aparecería en las instalaciones, quien con una sola mirada llamo su atención. Intento ignorar la existencia de la misteriosa muchacha por el resto del día, pero su cabeza parecía estar llenándose de curiosidad cada vez más, tal vez por el hecho de lo joven que era. Para cuando cayó la noche, zeth decidió quedarse hasta tarde corrigiendo uno de los tantos algoritmos que faltaban, y cuando por fin se rindió ante su cansancio, alisto sus cosas y se fue.
A los pocos minutos de salir fue sorprendido por una acalorada discusión de la muchacha y varios de sus compañeros, zeth no tenía intenciones de involucrarse en peleas, sin embargo sus pies quedaron clavados cuando escucho la voz de la chica, sus palabras eran impresionantes para él, sus ojos se abrieron y se enfocaron en ella, quien parecía estar tomando prestada la mente de zeth para responderle a aquellos hombres… a pesar de todo ello, las voces de los sujetos resonaban mas fuerte en conjunto, ahogando en sonidos estúpidos los validos argumentos de la chica, zeth se acercó al círculo, se hizo al lado de la mujer y apoyo sus opiniones con un tono de voz fuerte, aquello solo sirvió como incentivo para que una corta pelea se desatara. Cuando el combate acabo, los hombres se fueron del lugar, zeth por otro lado se devolvió a los baños del complejo para lavarse la cara y arreglarse sus ropas, donde fue alcanzado por la joven.
-Gracias por lo de allá abajo, mi nombre es Susan.
-Eran unos ignorantes, tu tenías la razón… soy Zeth, respondió mientras la miraba fijamente. algo a lo que ella contesto con una suave sonrisa, justo antes de que ambos se separaran de nuevo.
Al día siguiente, la vida de zeth continuo con normalidad, como si lo de la noche anterior nunca hubiese sucedido, de no ser porque cuando caminaba por las instalaciones observo a Susan trabajando. Su curiosidad se apodero de el y camino hacia ella para mirarla de nuevo, sin embargo, quedo impresionado al ver el arduo trabajo de la joven, “es una genio…”, pensó, su mirada paseaba por todos lados mientras su cerebro intentaba duramente de entender lo que veía, la chica se percató de su presencia y lo invito a hablar, aquello fue extraño para Zeth, era la primera persona en mucho tiempo con quien podía hablar y expresarse con libertad, sin miedo a ser juzgado, pero a diferencia de otras veces, no era zeth hablando solo o dando opiniones que solo eran respetadas, esta vez, aquella mujer compartía sus palabras, como si hablara con una personificación de el mismo.
Con el tiempo, ambos forjaron un vinculo especial, hasta el punto de convertirse en compañeros de hogar, zeth aprendió mucho de ella, y ella de él, se podría decir que después de conocerla, zeth se sintió parte de algo, la felicidad que buscaba. Sin embargo, aquello termino cuando Susan desapareció, en algún momento durante su trayecto para visitar a sus familiares, la joven chica se desvaneció, como si el frio aire de la ciudad se la hubiese llevado de un soplido, no había rastro que seguir, pero aun así zeth abandono todo lo que tenia para continuar en su búsqueda, finalmente, el recuerdo de Susan fue sepultado años después dentro de un sarcófago vacío.
Los años pasaron y la soledad invadió la mente de zeth, nunca pudo volver a ser el mismo después de aquel entierro, se refugió en la programación, en el vino y las historias, era su manera de recordarla.
En una larga noche, en la que zeth no podía cerrar sus ojos, los vestigios de aquellos momentos con Susan se apoderaban de su cabeza, en el fondo, se culpaba a si mismo por no poder encontrarla, que había un detalle que escapaba más allá de su comprensión, y cuando la luna estaba llegando a su punto más alto, un fuerte brillo ilumino su habitación, una especie de portal que lo tomo por sorpresa, la luz cegaba su vista, pero por alguna razón era incapaz de detener sus pies, que lentamente caminaban hacia el otro lado.
Especie: Brujo
Dones: Evanescent/Necromancer
Edad: 20 años
Bando: Dylan (Rey)
Fecha de entrada a Wishville: 18/06/1600
Nombre: Landers Deverell (OCUPADO)
@LandersDV_WV
Avatar: Joey McIntyre
Enfermedad Psicológica: Trastorno de estrés postraumático
Historia: Landers Deverell fue un niño que ya a primeras la madre del chico tuvo un parto complicado pero salió bien y ambos sobrevivieron, a medida que iba creciendo el muchacho se iba dando cuenta que su vida no iba a ser de color rosa, llena de amor y unicornios ya que contempló desde que empezó a tener uso de razón comportamientos un tanto machistas en su casa: El padre del niño pegaba a la madre, la insultaba, incluso llegó a encerrarla en el sótano durante una semana entera con poca comida y agua.
Un día cuando él tenía 15 años después de volver de clases vio a su padre violar a su madre delante de él y después matarla a sangre fria y descuartizarla. El padre sabía que su hijo estaba ahí y lo único que hizo fue reírse y posar su pistola en su sien y volarse los sesos, desde aquel instante el joven se quedó con graves traumas y estos dieron lugar al estrés postraumático.
Lo llevaron a una casa de acogida y una familia con otro hijo, lo acogieron y le dieron un poco de amor de ese el cual el pobre nunca recibió de su familia biológica, el joven habitualmente recibía ataques de ansiedad por la noche y de pánico ya que cada noche soñaba con lo que vio.
A los 18 dejó los estudios y se fue con su grupo de música pop para hacer una gira mundial, tras el paso de los años su grupo se hizo mundialmente conocidos.
Durante un corto tiempo se separaron y el sacó algunos discos cuando tenía 34 años, después de 4 años de parón volvieron y al año sufrieron un pequeño accidente de avión. Cuando menos se lo esperó despertó en un lugar maravilloso pero le dolía todo el cuerpo por culpa del accidente.
Especie: Brujo
Dones: Necromancer
Edad: 41 años
Bando Dylan (Rey)
Fecha de entrada a Wishville: 04/12/2019
Nombre: Sarah W. Mason (OCUPADA)
@RecklessMWV
Avatar: Elizabeth Olsen
Enfermedad psicológica: Esquizofrenia y Trastorno Narcisista de la Personalidad (TNP)
Historia: Era la edad de los 18, antes de eso Sarah era una simple chica de 17 años la cual no tenia ni la mas mínima idea de que su vida fuera a cambiar de esa manera.
El trastorno de Sarah fue detectado a esa edad, TNP, cuando sus padres ya no soportaban su errático comportamiento. Era abusiva con sus hermanas, pues siempre quería tener la atención de todos, solo ella. Después, a los 19 el doctor comentó a sus padres que tal vez estaba experimentado otros cambios pues le habían notado un segundo trastorno el cual era normal cuando se tenia TNP, Esquizofrenia.
Esto no ayudó a nada en su personalidad pues ahora la joven luchaba con dos problemas en una etapa tan importante de su vida. Iba a ir a una de las mejores universidades pero debido a sus cambios drásticos de conducta, la asociación de educación de Texas decidió que era mejor si la chica primero se internaba por un año completo en un Hospital Psiquiátrico; Sarah tomó esto de la peor manera.
Logró terminar un diplomado en artes, otro en hacker y el último en dibujo.
Sarah quería mas por lo que aceptó la propuesta, un año mas tarde a sus 19 años, de ir a dicho hospital. Los padres de la chica tomaron eso cómo una buena señal pues tal vez su hija estaba por tomar el camino perfecto, el sincero y el mejor para toda la familia. Estaban orgullosos de ella.
Sarah se adentro al hospital. No era ni remotamente cómo esperaba por lo que al llegar y observar a los pacientes la joven se volvió loca diciendo que una entidad la acechaba e iría por ella para sacarle los ojos, que de las sombras surgiría y se la llevaría al infierno.
La madre de la chica comenzó a llorar. El padre firmó los papeles y durante los próximos casi 6 años Sarah no supo nada de ellos.
25 años.
La corta etapa, antes de lo sucedido.
Era una mañana helada en texas, el termómetro apuntaba los -0 grados por lo que todo se sentía congelado. El suelo quemaba y el simple hecho de salir de la cama pareciera que el frío te quería matar.
Para Sarah todo aquello eran tonterías. El frío lograba ahuyentar a los demonios, así explicaba en las terapias de grupo y fue donde todo comenzó:
6:00 am
Después de aquella terapia, Sarah no estaba a gusto en su recamara. Hablar de los demonios le hacia recordar las dichas sombras que querían llevársela. Las pesadillas se hacían mas reales y cada que posaba su mirada en cualquier sitio de la recamara veía unos ojos rojos que trataban de llevarla consigo.
7:00 am
Era hora de la salida, Sarah esperaba en la puerta de la recamara. La llave entró, señal de que el enfermero estaba por llevarla a tomar su medicamento y escoltarla al área de dibujo, único lugar donde la chica podía experimentar cuan era mejor que todos en aquel hospital. Era cruel con las personas y humillaba a los enfermos por sus pésimos trabajos, pero saliendo de ahí, su pesadilla continuaba.
Iba camino a aquella area, estaba por llegar cuando en el fondo del pasillo observó una neblina negra. Un vapor que de ella salia una mujer con un aura oscura. La mujer alzaba su brazo en dirección a ella, la invitaba a unirse con toda las sombras que albergaba el infierno. Donde pagaría por sus pecados cometidos.
Sarah al ver aquello, reaccionó de la peor manera. Mientras estaba escondida atrás del enfermero, gritaba las peores cosas, macabras e insultantes a todos, incluyendo a aquella presencia. Los gritos eran desgarradores, los enfermeros solicitaron a los doctores del área de Esquizofrenia para poder calmar a la chica pero mucho antes de que ellos llegaran, Sarah logró tomar una pluma. Aquella pluma era pesada, pues había sido un regalo de los padre del enfermero, era de plata pura. La joven se colocó aquella pluma en su yugular amenazando con matarse si la hacían caminar por aquel pasillo. Los doctores al observar la reacción de la chica, volteaban hacia dicho lugar donde ella apuntaba pero sus ojos no captaban lo mismo que la chica.
La joven atormentada y a punto de llorar, fue caminando hasta el lugar, apuntando y diciendo "Miren, esta justo ahí, sus ojos me están devorando y quiere que vaya con ella... me quiere llevar al infierno" los doctores negaban la dicha presencia y ella solo replicaba "Ustedes son parte de todo esto, ustedes jamás me quisieron aquí... son iguales a mis padres" Sarah tomó la pluma y la aplastó mas contra su yugular para decir " Esto... ¡Esto es lo que ellos quieren!" y dicho aquello, la chica clavó con una fuerza inexplicable la punta de la pluma en su yugular donde la sangre brotó y brotó, los doctores se apresuraron a cargarla y controlar la sangre, la joven pelinegra solo mencionaba lo siguiente: " Lo veo, es una luz... ella me pide atravesarla, estoy caminando hacia ella... estoy... entrando, es bella... ella, ella me señala que continué y solo puedo ver un lugar feliz... esa chica... esa chica es idéntica a mi" .
Especie: Bruja
Dones: Illusionist/Evanescent
Edad: 25 años
Bando: Eli (Reina)
Fecha de entrada a Wishville: 23/07/2007
Nombre: Köl Howe Lundgren Mason (OCUPADO)
@dangcrtrickWV
Avatar: Benjamin Wadsworth
Enfermedad Psicológica: Piromanía
Historia: Con los años en Wishville, Sarah se forjó una reputación de bruja cruel y sádica. Una bruja que no dejaba vivo al que estuviera delante de ella y que amenazara con lastimarla. Esa crueldad era la misma que decía jamás iba a enamorarse y más por el hecho de siempre salir lastimada en las cosas del amor.
Con el tiempo iba a conocer al que su corazón de hielo iba a aceptar para hacerlo cálido y agradable al tacto.
Räv, Nightmare que parecía solamente divertirle molestar, atacar y robar. Un Nightmare que se dio a conocer por las crueldades de sus pesadillas y además, de su sarcasmo y nada agradable comportamiento. Tal vez eso fue la fórmula para unir a dos alas que parecían estar destinadas a estar juntas. Durante un año y meses, se conocieron, enojaron, enamoraron pero sobre todo se complementaban. Eran tan unidos y a la vez tan solitarios que eso hacia que su amor creciera cada día más. Cuando necesitaban de ambos, ahí estaban y es que su amor era bastante simple pero fuerte.
De todo ese gran amor nacieron tres pequeñas. Una de ellas escondida, jamás supieron de la pequeña y es que estaba protegida entre sus hermanos cómo si fuese todo el amor que Saräv se tenían, cómo si era ella quien cuidaba de ambos corazones.
Alinette, Linnéa y Howe.
Trillizos, niños normales que no presentaban ningún signo de tener algo por el que preocuparse. Aún cuando Sarah y Räv estaban nerviosos de su inicio cómo padres, eran felices.
Especie: Brujo
Padres: Sarah (Bruja) y Räv (Nightmare)
Edad: 19 años (En crecimiento)
Bando: X
Fecha de nacimiento: 15/09/2019
Nombre: Ansel Wright Clutterbuck (OCUPADA)
@AnselC_WV
Avatar: Rafael Miller
Enfermedad Psicológica: TOC
Historia: Ansel Wright Clutterbuck es un estudiante de primer año de una escuela de arte, estudiaba para ser arquitecto. Cada cierto tiempo recae en el hospital debido a ataques de ansiedad, y/o paranoia. Se le ha diagnosticado con Trastorno Obsesivo Compulsivo, el cual mantiene unas fuertes dosis para calmar sólo la ansiedad severa, por tanto, en su casa heredada por sus padres, solo desde los 18.
Su padre muere el mismo día de su cumpleaños número 18, tal como funcionaria un reloj dañado. Hora de nacimiento, hora de muerte mas 1 segundo.
Esto le activó su trastorno y lo hizo severo, por lo que luego de dos años en terapia pudo entrar a la escuela de arte, este le ayudaba a liberar su ansiedad y el arte escondido.
Luego de dos años de su última recaída, descubre que su trastorno a pesar de ser constante a través de los años, desde la muerte de su padre los síntomas han sido más fuertes.
Ansel ha caído en el juego de fichas y ajedres para asociarse en la ciudad de Salem, nacido y guiado en el camino Wicca...
Especie: Brujo
Dones: Encryptor/Cataclyst
Edad: 20 años
Bando: Dylan (Rey)
Fecha de entrada a Wishville: 31/01/1999